Bumping ¿Cómo funciona este método de robo?

El bumping es un método de robo muy conocido en el que se manipula la cerradura.

La diferencia de este método respecto a otros radica en que mediante él la cerradura no se rompe, sino que se abre por el movimiento interno de sus piezas mediante la acción de una llave, la que es golpeada con algún elemento contundente, como un martillo. 

¿Qué es el bumping? 

Se conoce como bumping a un frecuente método de robo que consiste en vulnerar la cerradura de una puerta. Para ello se emplea una llave adaptada, cuya función es mover los pistones del cilindro de tal forma que salten y así, pueda girarse la llave. La popularidad del método se basa en que es sencillo de ejecutar, rápido y efectivo. 

 ¿Cómo se realiza? 

Para abrir una cerradura mediante el método de bumping, se requiere de una llave bumping. Estas llaves pueden adquirirse en el comercio legal, pero también hay quien las fabrica por cuenta propia. La razón de su venta legal es que el método no solo es utilizado por ladrones, sino también por cerrajeros, quienes las emplean con fines lícitos. Además, se necesita un martillo o algún otro elemento contundente, que será empleado para golpear la llave. 

El primer paso del método consiste en introducir la llave en el cilindro. Luego, esta debe golpearse con un solo golpe, de gran intensidad, o mediante reiterados y rápidos golpes, de menor intensidad. La técnica finaliza con el giro de la llave, que debe hacerse inmediatamente después de golpearla. 

Identificación del método  

Esta técnica, a diferencia de otras, no destruye la cerradura, ya que se basa en el movimiento interno de los pistones, que están al interior del cilindro. Por ello, cuando se aplica, no suelen presentarse daños fácilmente visibles. En ocasiones, sin embargo, una cerradura que ha sido abierta mediante bumping podría quedar marcada con rayas en el metal. Además, en ocasiones los pistones quedan funcionando de forma imperfecta, lo que se reconocerá en que el mecanismo no abre con facilidad. 

Si su cerradura o la puerta misma están claramente dañadas, es razonable pensar que el método utilizado en su apertura fue uno distinto al bumping, aunque existen otros métodos de apertura que tampoco dejan claros indicios, como, por ejemplo, la impresión o impresioning. 

Medidas de protección frente al bumping

La primera medida de protección que puede ayudar a evitar la utilización de este método, es contar con un sistema de seguridad. Los elementos de protección y su respectiva señalización actúan antes que nada como dispositivos de disuasión; un ladrón evitará vulnerar un recinto protegido mediante un sistema de seguridad. La instalación de una alarma le permitirá, además, identificar cualquier actividad irregular en el recinto protegido, incluyendo la apertura de puertas. Por último, estos sistemas son capaces de alertar al usuario ante la presencia de un ilícito o emergencia en su inmueble.  

La principal razón para preferir un sistema de alarma es que protegerse únicamente contra un método de entrada a un inmueble es infructuoso, ya que los ladrones generalmente poseen diversos métodos que pueden aplicar. Así y todo, en el mercado es posible encontrar cerraduras antibumping, que están construidas especialmente para prevenir la aplicación de esta técnica.