Alarmas sísmicas: qué son y características

 Cuando escuchamos hablar de alarmas, generalmente pensamos en sistemas de seguridad destinados a la protección contra robos. Sin embargo, pese a que algunas de ellas sean menos conocidas, existen diferentes tipos de alarmas, cuyos usos van más allá de la prevención de delitos. A continuación, revisaremos un ejemplo de lo anterior. Se trata de una herramienta particularmente interesante para un país de gran actividad telúrica como es Chile, y son las alarmas sísmicas. 

 ¿Qué son las alarmas sísmicas?  

 Las alarmas sísmicas son aparatos cuya finalidad es la detección y alerta de movimientos telúricos. Actualmente, gracias al perfeccionamiento de tecnologías como los acelerómetros, es posible disponer de este tipo de alarmas en escalas locales; pero generalmente estos sistemas son aplicados en territorios amplios, como un país o región. 

 ¿Cómo se activan las alarmas sísmicas?

 Una alarma sísmica moderna está compuesta por diversos componentes, tales como acelerómetros, sismómetros, procesadores de datos, entre otros. En todos los casos, el aparato se activará cuando ocurra un movimiento telúrico. Es necesario recordar, sin embargo, que la actividad sísmica es un proceso permanente, aunque normalmente esta ocurre en intensidades que no causan inconvenientes para la vida cotidiana de las personas. Por esta razón, se requiere establecer un parámetro a partir del cual el movimiento terrestre activará una alerta. 

 Características de las alarmas sísmicas 

 El monitoreo de la actividad telúrica ha sido un interés de la ciencia desde tiempos remotos. Por ello, se han desarrollado una gran variedad de instrumentos de medición y alerta a través del tiempo. El primero de ellos data de hace casi dos mil años y fue elaborado en China. Así y todo, lo que todavía no ha podido inventarse es un mecanismo capaz de predecir un sismo, razón por la cual hasta el presente las alarmas sísmicas se limitan a identificar y cuantificar un evento sísmico en curso, para alertar sobre él con la mayor celeridad posible. 

 Componentes de una alarma sísmica 

 Todas las alarmas sísmicas están conectadas a un sismógrafo. Estos son dispositivos emplazados en la superficie terrestre y que se componen de una serie de resortes que sostienen un elemento estático. El movimiento del aparato respecto a este último es registrado y posteriormente amplificado, para representar la magnitud real del sismo. 

Un sistema completo de alarma ante sismos dispondrá de una serie de sismógrafos instalados en distintos puntos de un territorio. La información recopilada por ellos será enviada a una central de procesamiento, la cual es capaz de analizar los datos y establecer patrones de actividad. Así, es posible determinar la ubicación de un epicentro y el comportamiento de las ondas de movimiento a través de la tierra. 

 Los sistemas que han sido implementados en los últimos años están vinculados a centros de difusión de la información que pueden avisar a los usuarios por medio de internet o mensajes SMS. Estos mecanismos de alerta complementan los ya existentes, como son, por ejemplo, las bocinas de alerta. 

 Para finalizar, cabe señalar que en la actualidad se siguen haciendo grandes esfuerzos para perfeccionar los sistemas de alerta de sismos; se trata de un tema desafiante para los científicos, al mismo tiempo que necesario de desarrollar.